Todo comenzó hace un año, en una tarde gris en Benavidez. Apo Apo llegaba como líder al choque de cuartos de final y enfrentaba al mismo Deportivo Maipú con el que había empatado 1-1 una semana antes. Pero la historia no iba a ser ni siquiera parecida. Con un contundente 4 a 0 que muchos compararon después con la derrota de Argentina frente a Alemania en la última Copa del Mundo, Maipú destrozó la ilusión de Apo una vez más en un torneo organizado por Clarín.

Como cada campeonato en cancha de 11, este torneo se caracterizó por la falta de compromiso y las ausencias repetidas de distintos jugadores que vistieron la camiseta blanca. Esto, sumado a los cambios de sede y a los (no) cambios de horario, imposibilitó la tarea de armar un equipo competitivo en todos los encuentros que se disputaron. El final fue el ya mencionado.

Pero en vez de caer otra vez en lo mismo, la Comisión Directiva tomó una decisión que iba a ser fundamental en la historia del club. Recortando el plantel a 8 jugadores (más alguna excepción), apostó nuevamente a un torneo Clarín, pero en este caso en cancha de 7. Además, volvió a conformar un cuerpo técnico fijo con Eduardo Beltrán a la cabeza. Y el resultado fue muy positivo: las convocatorias comenzaron a ser mucho más fáciles, los jugadores se reencontraron con el fútbol simple y vistoso que siempre los caracterizó y los resultados empezaron a acompañar. De esta manera, Apo Apo comenzó la temporada 09/10 de la mejor manera, ganando 17 partidos consecutivos y obteniendo el cuarto título de la institución.

Pese a que la prensa criticó mucho el nivel de los rivales, Apo se impuso no solo a todos los equipos que entraron a la cancha en Obras, sino también a todos los inventos de un Staff que lo único que quería era obtener más dinero. Encabezado por Alejandro y Gustavo, el famoso Staff hizo jugar al equipo más partidos que el resto (primero se iba a hacer un triangular final y después terminó siendo una semifinal y un supuesto partido decisivo contra un rival que ni siquiera jugó semis), le inventó un empate que nunca existió (Apo ganó todos los partidos), e hizo que el ganador de la “A” (Apo estaba en la “B”) sea el rival en una final que no se disputó hasta febrero de 2010.

Ya en febrero, luego de muchas idas y vueltas, Apo Apo despachó a Saint Michelle por 5 a 1 y se consagró campeón invicto por primera vez en su historia.

La CD, cansada de los manejos del pelado, comenzó a buscar torneos para la segunda parte de la temporada 09/10 y se encontró con un personaje llamado Martín Capparelli. Con toda la humildad del mundo, este señor organiza torneos llamados MC (iniciales de su nombre) en fútbol 5, 8, y 11. Quizás por esa espina clavada de siempre y obviamente porque el verdadero fútbol es el que se juega en cancha grande, Apo Apo volvió a los campeonatos de 11 de la mano de MC. Con la fe renovada, con refuerzos de jerarquía y compromiso y con el mismo hambre de gloria de siempre, el conjunto de Edu llegó al Club Comunicaciones con un solo objetivo: el bicampeonato.

El equipo fue ubicado en la Zona Plateada del torneo y comenzó su participación con el pie izquierdo. Finalizados los primeros 35 minutos de Apo en este nuevo Campeonato, el resultado era 0-1 ante un rival que no parecía ser competitivo en lo más mínimo. El segundo tiempo mostró un Apo totalmente distinto y contundente: más de media docena de goles para la primera victoria por 7 a 1.

Seis victorias y tres empates llevaron a Apo a clasificar a los cuartos de final, o eso por lo menos fue lo que pensaron todos. En una maniobra digna del Staff del Clarinete, Capparelli hizo cruzar a los 5 primeros equipos de cada zona (dorada y plateada) con los 5 últimos. Una movida que una vez más tenía solo el fin de aumentar la billetera personal. Con 4 victorias y un empate, Apo clasificó en la segunda posición de la zona plateada y enfrentaba a San Pablo en los cuartos de final.

Pero la (des) organización del torneo MC no se conformó con inventar partidos. Esta vez con una movida que ni el pelado podría haber nunca imaginado (si leyó bien, ni el pelado), MC le otorgó ventaja deportiva a los equipos de la zona dorada (claro, el oro vale mas que la plata). De esta manera, si Apo empataba en los cuartos de final con San Pablo automáticamente quedaba eliminado del Campeonato.Una vez más el equipo de la Modelo sacó a relucir toda su garra y su fútbol, y en un partido que terminó colgado del travesaño derrotó (con Iron Man en cancha) al equipo paulista por 2 a 1.

En la semifinal nuevamente corría con ventaja deportiva en contra. El rival era el último campeón Internados que había terminado primero en la Zona Dorada. Apo iba ganando un partido impresionante por 1 a 0 hasta que la AFA y la policía decidieron suspender el encuentro debido a que San Telmo estaba jugando contra Atlanta en la cancha principal de Comunicaciones. La reanudación fue un trámite. El equipo amarillo, que jugaba con uno menos por la expulsión de uno de sus jugadores, no llego ni siquiera a 10 players y el resultado fue una goleada de Apo en la sede Alvear un jueves a la noche con un frío importante. Apo a la final.

La promesa de Martín Capparelli a la Comisión Directiva antes de comenzar el torneo de que las canchas estaban en buen estado solo se cumplió en la final. Apo Apo enfrentó al club 7 de Enero en el estadio principal de Comunicaciones. El partido fue parejo en los primeros minutos hasta el primer gol del equipo de Edu. A partir de ahí, 7 de Enero fue solo eso, una fecha, y Apo Apo le ganó el partido en todos los aspectos, se llevó la final con un claro 6 a 0 y sumó una estrella más en su gloriosa camiseta.

Los 34 partidos sin recibir derrotas en la temporada (31 victorias y 3 empates) son solo una estadística más de lo que el equipo logró en este último tiempo. Compromiso, buen futbol, garra, huevo, actitud, personalidad y chapa de campeón son solo algunas de las palabras que explican este presente del club.

Hoy más que nunca, llevo con orgullo el nombre de ApoApo11. Hoy más que nunca tengo la satisfacción de decir que en el año del Bicentenario, yo te Bi Campeón.

ApoBlog.