Por: Pablo Beltrán [redacción de Apoblog]
No fue el discurso de Al Pacino en “Any given sunday”,
ni las sabias palabras de “vamos a salir a comerles el orto” de Mancuso en el partido contra Alemania (véase a quien le quedó peor el orto en ese encuentro). No fue Mel Gibson y su inspirador monólogo sobre la libertad
ni el speech del gran Aragorn antes de cruzar la puerta negra y enfrentarse a los orcos (véase el cagazo que tenían los humanos antes de que Viggo hable y finalice con lágrimas en los ojos con un inolvidable “for Frodo”).
No fue fuerte ni fue gritando, no fue vendiendo humo ni agarrandose los testículos en señal de poner huevo. Fue claro, conciso, breve, y llegó al corazón. Las palabras de Edu reflejaban lo que más tarde se vio en la cancha cuando los gladiadores con ojos de tigre ganaron otra batalla: Era una final.
Y se jugó como tal. Apo arrancó el partido al grito de “somos los del 2004” y en 20 segundos durmió a un Basta de Fútbol que salió a ver que pasaba y mirando desde arriba en la tabla. Toque al medio de Fabo y gol de Pablito: 1-0. Rápidamente los nuevamente vestidos con la de Ironman empezaron a manejar la pelota con la jugadita de la cabeza (by Omi) e hicieron salir al rival. En cuanto se abrieron dos espacios apareció el Cuervito y clavó dos goles (el tercero para poner en un cuadrito) y parecía que todo se encaminaba a una contundente victoria.
Del otro lado había puro nerviosismo y en algunos jugadores muestras de resignación (véase al flaco que hizo jueguito ante la atenta mirada de todos y después la sacó de la cancha). Pero Basta de Fútbol no salió campeón en la F por nada. De a poco comenzó a presionar y a encontrar su juego, a gritar y a intentar llevarse por delante al rival. Encontró el descuento tras un error en la zaga central de Gero. El mismo Picón se iba a disfrazar de Gnomo unos minutos más tarde para hacer ¿el mejor gol de su carrera? Yo creo que si. Recibió de un corner, amagó hacia adentro como el Enzo contra Vélez en el 97 y cruzó un remate que se incrustó en el ángulo del pelado arquero rival. Al descanso 4-2. Si, Basta hizo un gol que no recuerdo por la adrenalina del partido, hay que tener en cuenta que quién escribe también lo jugó.
El segundo tiempo comenzó con un Apo jugando en su campo y bastante replegado. Basta empezó a llegar y la defensa (comandada una vez más por el mariscal Freire) empezó a transpirar de más. Sin embargo, en un contragolpe certero, el Beltrán mayor se escapó por derecha y quedó cara a cara con el 1. Esperó hasta el último instante para picarla despacito al medio para que Pablito marque el gol que parecía sellar el partido.
En este momento es donde se justifican los 66 goles que llevaba hasta este partido el delantero de Basta de Fútbol. Cabezazo Palermesco y olfato de Cavenaghi en dos goles totalmente distintos y con todas las características que tiene que tener un 9 de área: 5-4. Era el momento de Basta pero la imprudencia de uno de sus jugadores lo dejó con 7.
Apo se serenó e intentó tener la pelota, pero no supo aprovechar el hombre de más y sufrió demasiado. Hasta que llegó la jugada del Deja Vu: el 10 rival quedó mano a mano para empatar el partido pero esta vez el brazo izquierdo del Bilo fue el salvador. Codo va, patada viene y Poncio Pilato rajó a los dos. El Cuervo cumplió y se llevó a uno: 7 contra 6 y uno arriba para los de La Modelo a falta de pocos minutos.
Los guerreros seguían batallando y defendiendo la fortaleza, ya sin piernas, algunos sin hombros y otros sin aire, pero con esa fuerza interior y ese plus que hace sacar a los jugadores este tipo de partidos. Un gol significaba quedarse afuera del campeonato y había que liquidar el partido de cualquier manera. Pablito tocó al arco vacío y un defensor se vistió de arquero para ahogar el grito de gol ¿Penal y roja? No, penal y amarilla. Increíblemente, el torneo no juega con la ley del último recurso.
En los pies del Messi de Apo quedó la responsabilidad de liquidar. Pero como la pulga hace poco, Gianelli no pudo clavarla desde los “12 pasos” (mérito del pelado que sacó una pelota increíble). Un par de minutos más tarde el fútbol le dio revancha al crack que definió con clase y desató la locura de la tribuna de Apo. Y la locura de un jugador de Basta que dejó a su equipo con 5 después de una patada criminal. Tumulto hasta que Fabi levantó los brazos y el Bilo entendió el mensaje: “lo terminó”.
Final antes de tiempo por incidentes, increíble e inolvidable victoria de Apo en el clásico. Algunos se encargarán de detallar lo que pasó después de lo que fue una lección de fútbol y carácter. Los tigres quedaron exhaustos, doloridos, extenuados. Pero como dice la canción “Y así vivir” de La Vela Puerca: “no hay alegría sin dolor”. La sensación más hermosa del mundo es cuando te duele todo pero sabés que ganaste, que cumpliste el objetivo aunque no te puedas mover.
Quedan dos semanas para ponerse a punto, está todo a favor de Apo y no hay que ser PECHUGAS, que como dice también la linda letra de esa nueva canción de los amigos uruguayos… “todavía falta lo mejor”.
5 comentarios:
Giiilees el primer gol a los 20 segundos fue pelota robada mia.... y despues se la di a fabo y toque al medio de pablito bilo de mierda sacandome credito -.-
Cuervo
Ojalá pudiera presenciar el partido del domingo! Es lo único qe qiero... Para alentar al eqipo y darle suerte! :)
Fabi dijo que el pase al medio había sido asistencia de él, yo no recuerdo bien, insisto con lo que dice la nota, no puedo estar en todos los detalles cuando tengo que estar atajando y puteando a la defensa al mismo tiempo.
Elbi lodelagente
Impecable comentario y una perfecta síntesis de lo que ocurrió.
El DT
Saca basta, van a pelear cuervo y fabi traba y recibe cuervo y abre para fabi y fabi cruza para gnomo que toca al gol
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